
Día 1
Después del
recibimiento del día anterior, y tras recargar las pilas después de un
viaje tan largo, comenzamos pronto la jornada ya que el día promete ser
intenso. Pasamos toda la mañana recorriendo pequeños comercios del
pueblo, haciendo acopio de todo tipo de productos que previamente nos
han pedido las familias que visitaremos al día siguiente (leche en
polvo, pañales, toallitas, harina, sal, aceite). Conseguimos dos
objetivos, ayudar a familias necesitadas enclavadas en el sur de Kosovo y
revitalizar la actividad económica del pequeño comercio serbio en el
norte. Acudimos a uno de los restaurante del pueblo dónde damos cuenta
de la buena calidad de la gastronomía de la zona (terminaremos
haciéndonos habituales del lugar), y volvemos a los apartamentos para
terminar de preparar la presentación de nuestro viaje.
Se preparó el material de primera necesidad para ser entregado
A las 16:00 acudimos a una pequeña sala en el centro de Leposavić, que pronto se quedó pequeña, y dónde gracias al trabajo de nuestra compañera Verka -haciendo de traductora al serbio- conseguimos trasladar a los vecinos de la localidad el origen, trayectoria y proyectos actuales de Solidaridad Kosovo, así como los detalles de la misión de ayuda en curso que nos había llevado allí. Gracias a la colaboración del centro cívico podemos proyectar un vídeo y presentación en diapositivas de la ONG que nuestro compañero Roberto había preparado, tanto en español como en serbio. Terminada la intervención recibimos el agradecimiento y apoyo de muchos vecinos, y nos ponen sobre la pista de dos centros de refugiados "temporales", que llevan 15 años en funcionamiento, que están al doble de su capacidad y que se encuentran en una situación muy precaria. Tomamos nota y concertamos una reunión con el encargado de estos centros.
La conferencia impartida por los cooperantes en Leposavić fue un éxito
Día 2.
Madrugamos para ponernos en marcha hacía
las siete familias que esperan nuestra pequeña ayuda. Pequeña parada en
Mitrovica para terminar de comprar los últimos productos y finalmente
cruzar el río Ibar en dirección hacia el sur, bajo la mirada de las
tropas de la KFOR que continuan apostadas en la ciudad. Antes de cruzar,
se procede a un extraño ritual que es ya habitual entre los habitantes
de la zona pero que no deja de ser impactante para nosotros, españoles.
El segundo coche de la misión debe cambiar sus matrículas por unas del
"estado de Kosovo", que sólo sirven en esa región, para poder circular
con seguridad por zona albanesa. Nosotros, con matrícula europea, en
principio seremos respetados. Ponemos rumbo hacia Istok y durante toda
la jornada visitamos a las familias serbias que han tenido el valor
suficiente para regresar a su tierra después de la guerra. Viven en
casas de nueva construcción, las ruinas de sus antiguas viviendas
permanecen cerca de allí, como agrio recordatorio del pasado más
reciente. Nos resulta imposible rehuir la hospitalidad de estas humildes
familias, probamos (algunos sufrimos) el tradicional rakia mientras nos
cuentan sus vivencias, reímos con sus bromas y estrechamos sus manos en
señal de agradecimiento. Hay una ausencia total de resentimiento u odio
en sus palabras, tan solo resignación por el pasado y ganas por salir
adelante en el futuro.
Los voluntarios entregan material de primera necesidad a familias de refugiados retornados
Nos despedimos de nuestros acompañantes
locales (nos comentan que una radio local hará en breve una reseña de
nuestra visita y ayuda, de la que toman numerosas fotos), y volvemos al
caer la noche hacía Leposavić. Las palabras e imágenes vistas hoy nos
acompañan hasta la cama.
Día 3.
Nos reunimos a primera
hora de la mañana con el encargado municipal para los centros de
refugiados, con el objetivo de conocer la situación real y valorar en
qué medida podemos ayudarles. Nos acompaña a conocer de primera mano la
situación de estos centros. El recibimiento es frío, no entienden qué
hacen cuatro jóvenes extranjeros husmeando en lo que después de tantos
años ha pasado a ser su hogar. No hacen falta muchas traducciones, salta
a primera vista el deplorable estado del baño y cocina, de uso común
para todos los inquilinos. No cabe duda de que es muy necesaria nuestra
ayuda aquí, por lo que nos ponemos en marcha para pedir presupuestos y
valorar que resulta más necesario cambiar.
Finalmente acordamos la compra, entrega e instalación de un nuevo mueble-fregadero, una lavadora, una nueva cisterna para el baño, grifos, fuegos de cocina y utensilios varios para la vida diaria. Concretamos que la instalación se realice lo más pronto posible, y hacemos además entrega de materiales de limpieza e higiene para el mantenimiento de ambos centros.
Roberto, Emilio y Jorge junto al material de limpieza entregado al centro de refugiados
Finalmente acordamos la compra, entrega e instalación de un nuevo mueble-fregadero, una lavadora, una nueva cisterna para el baño, grifos, fuegos de cocina y utensilios varios para la vida diaria. Concretamos que la instalación se realice lo más pronto posible, y hacemos además entrega de materiales de limpieza e higiene para el mantenimiento de ambos centros.
Los voluntarios dotaron al centro de refugiados de todo lo que era necesario
Días después de nuestra vuelta nos comunican nuestros colaboradores que, al volver al centro para supervisar los trabajos de instalación de los muebles y electrodomésticos, se acercan muchos de los refugiados que aguardaron desconfiados el primer día, y les transmiten su inmensa gratitud por el gesto realizado que tanto les va a mejorar su calidad de vida, y sus disculpas por el comportamiento del último día. Por supuesto, no hay nada que perdonar
La ayuda también consistió en cambiar lavaderos, mobiliario, grifos y tuberías dañadas por el paso del tiempo
Día 4
Recibimos la
llamada de la doctora encargada del centro municipal de salud de
Leposavić, que nos traslada las necesidades de suero, adrenalina y otros
medicamentos que escasean en el centro médico, y nos pide nuestra ayuda
y colaboración. Acudimos en su compañía a la farmacia más cercana, en
el mismo Leposavić, y encargamos todo lo necesario, de lo que parte (el
suero) no llega más que por petición especial y tardará unos días
(nuestros compañeros que quedan allí nos confirmarán días más tarde, con
fotos incluidas, la correcta recepción de todo el encargo). Del resto
hacemos entrega en el centro médico, saludando a las enfermeras y
doctores que allí desempeñan su labor y recibiendo su agradecimiento.
Hicimos entrega de la medicación que nos reclamó el centro médico de Leposavić
Dando por finalizado el trabajo por esta ocasión, y antes de partir de
regreso al día siguiente, decidimos organizar una pequeña reunión y
brindar con nuestros nuevos amigos por su hospitalidad y apoyo durante
estos días. Nos aguarda aún una pequeña sorpresa, cuándo el dueño de los
apartamentos dónde hemos estado alojados nos obsequia con una botella
de rakia artesanal especialmente dedicada, y se une al brindis con
nosotros. Alguno de nosotros, además, aprovecha para comprar y probar el
vino tinto de la región, elaborado en los monasterios, famosos en la
región y que no desmerecen en absoluto esa fama.
Con sensaciones
encontradas, el recuerdo por siempre en nuestras memorias y, a buen
seguro, en los amigos que nos acompañaron durante este viaje (gracias
Verka, gracias Roberto, y gracias también a nuestro nuevo colaborador
serbio en la región: Milos), abandonamos Kosovo rumbo de nuevo a Madrid.Como pudimos trasladar en diversas conversaciones con vecinos y
amigos, los que hemos ido en este viaje somos sólo algunos de los
miembros de un grupo mayor de personas que componen la ONG, cuya ayuda y
colaboración resulta imprescindible para permitir que proyectos como el
de este viaje salgan adelante. En el futuro, estamos seguros, no
faltarán ganas ni compañeros dispuestos para repetir esta experiencia y
continuar con el proyecto de solidaridad iniciado.
En nombre de
todos los que formamos parte de Solidaridad Kosovo GRACIAS por vuestro
apoyo y por creer en una forma diferente de llevar la solidaridad a un
rincón tristemente olvidado de Europa. Hasta la próxima.